La inmunización de las enfermeras en primera línea que no llega

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Con el horizonte puesto en la inmunización prioritaria del personal sanitario, las enfermeras miran al futuro de su profesión y a un 2021 marcado por la vacunación.

La inmunización de las enfermeras

“Cuando nos ponen en la cuerda floja te das cuenta de dónde hacen falta los recursos”. Leire Ponte, enfermera del hospital de Cruces de Bilbao resume bien la situación vivida durante el último año por el personal sanitario mundial.  La escasez de profesionales y material médico ha evidenciado cómo nuestros sistemas públicos de salud se han desbordado ante la emergencia provocada por la COVID-19.

“La gente se ha dado cuenta de que la sanidad es un recurso en el que hay que invertir. La pagamos todos, pero a todos nos gusta que nos atiendan los mejores profesionales con los mejores recursos y con la mejor cara posible” afirma Leire. Y es que, si algo estamos aprendiendo durante esta crisis, es que la sanidad pública ha de ser la punta de lanza que nos lleve a vencer al virus. Y en esto, las enfermeras son el brazo ejecutor, quienes día a día velan por la salud de todos y, ahora, por conseguir la inmunidad de grupo.

Pero, ¿Se están dando pasos para inmunizar primero al personal sanitario que garantizará una salida airosa de esta pandemia?

La vacunación que no llega

Según el Sindicato de Enfermería, SATSE, el calendario de vacunas no se está aplicando a tiempo y hay una falta de inmunización de profesionales sanitarios de primera línea y, en concreto, de muchas enfermeras expuestas al coronavirus que no han recibido aún la vacuna. En datos generales, sólo el 2,3% de la población española ha recibido ya las dos dosis.

Esta situación genera desaliento, pero en el contexto de los países africanos donde intervenimos desde Anesvad el panorama es, si cabe, más inquietante. Ni siquera han llegado las primeras dosis.

Mélaine Pélagie Wobe, enfermera del Hospital Materno-infantil de Abiyán, en Costa de Marfil, lleva más de 10 años trabajando en un contexto sanitario marcado por la falta de recursos y personal. “Hacemos un llamamiento a que se reconozca nuestro trabajo. Las autoridades deben crear las condiciones necesarias para visibilizar nuestra labor y velar por protegernos” afirma Mélaine. Costa de Marfil prevé recibir las primeras 2 millones de dosis del mecanismo COVAX a principios de marzo, que solo alcanzarían a cubrir un 3,85% de la población marfileña.

Ante esto, exijamos que se redoblen los esfuerzos para inmunizar a los grupos prioritarios de vacunación como las enfermeras en todo el mundo, así como que se garantice una accesibilidad universal a la vacuna contra la COVID-19.

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Mikel Edeso
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